Tras la decepción general que supuso Windows Vista, Microsoft se ha puesto rápidamente manos a la obra con su nuevo sistema operativo: Windows 7. La versión definitiva saldrá a la venta el próximo octubre. Para saber qué pueden esperar los consumidores, hemos probado una versión previa: se lo contamos.
Con su nuevo sistema operativo, Microsoft se desmarca de la línea seguida en los últimos años. Por ejemplo, deja a un lado los nombres “de fantasía” (XP, Vista…) y vuelve a la simplicidad del número para indicar la versión: Windows 7.
Hemos probado la versión candidata que puede descargarse de la página oficial de Microsoft. Las mejoras respecto a Vista son evidentes.
Una inferfaz más racional y un sistema más rápido
La versión de Window 7 que hemos probado dispone de una interfaz de usuario que recuerda a Vista, pero algunas acciones son ahora más fáciles de realizar y requieren menos pasos. La racionalización de la interfaz es algo positivo. Incluye la nueva funcionalidad "aero peek", que ofrece una vista previa de las ventanas ocultas, al estilo de lo que hace Mac OS X.
Además, se han reducido significativamente los tiempos muertos. Da la impresión que el nuevo sistema operativo es más veloz. Microsoft ha prometido un sistema que se adapta mejor a la potencia del hardware de cada equipo. Queda por comprobar qué resultado dará en los netbooks, los populares mini portátiles de prestaciones básicas. La versión de Windows 7 específica para netbooks no debería tardar.
En Europa, sin Internet Explorer
Una novedad significativa es que las versiones de Windows 7 que se vendan en los países de la Unión Europea no contarán con Internet Explorer. Una decisión tomada para poner fin a un largo contencioso con las autoridades europeas, que han acusado en distintas ocasiones a Microsoft de abusar de su posición dominante en el mercado.
El motivo es que la presencia de programas como Windows Media Player e Internet Explorer hace que muchos usuarios no busquen ni instalen programas alternativos. Además, con sus programas Microsoft promueve el uso de tecnologías propietarias, por cuyo uso la industria debe pagarle.
La ausencia de Internet Explorer podría beneficiar al ya popular navegador Firefox y también a otros como Opera, Google Chrome o Safari.
Hoy por hoy, no contamos con una versión de prueba de Windows 7 sin Internet Explorer. Este navegador está muy integrado en el sistema operativo, por lo que es probable que no se elimine del todo: esto obligaría a reescribir una buena parte del sistema operativo y podría generar incompatibilidad con ciertas aplicaciones diseñadas para interactuar con el navegador de Microsoft (que, recordemos, es parte integrante de sus sistemas operativos desde que se lanzó Windows 98, hace 11 años).
A pocos meses del lanzamiento de Windows 7 no parece posible un cambio radical, las mejoras probablemente vengan a solucionar problemas detectados en la versión candidata y poco más.
Pedidos anticipados y opción de actualización
Actualmente ya existen a la venta equipos cuyo precio incluye la opción de actualización a Windows 7. Puede informarse en la web del fabricante.
También es posible realizar pedidos anticipados de Windows 7 a través de Microsoft Store España. Los precios y versiones disponibles para pedidos anticipados son los siguientes:
* Windows 7 Home Premium: 199,99 euros
* Windows 7 Professional: 309,00 euros
* Windows 7 Ultimate: 319,00 euros
Existen dos modalidades de cada versión: las versiones cuyo nombre va seguido de la letra “E” no tienen Internet Explorer mientras que en las que se indica la letra “N” no tienen ni Internet Explorer ni Windows Media Player.
Para los pedidos anticipados se necesita tarjeta de crédito, aunque el cargo no se producirá hasta que se aproxime la fecha de lanzamiento oficial (prevista el próximo 22 de octubre), momento en el que le pedirán, con un correo electrónico, que confirme su pedido.
Fuente: www.ocu.org